Días pasados del mes de septiembre del año en curso se realizo una lectura referente al tema de "El desarrollo de la personalidad y la identidad" en los adolescentes, en la cual se tenía que hacer unas diapositivas ya sea en prezi o en power point, (lo tengo publicado más abajo del Blogger)  una vez realizada dicha actividad, en el aula de clases pasarían a explicar el tema, el cual se refiere a la lucha en la cual se determina cual es nuestro verdadero yo, de acuerdo a la lectura se menciona que sí desde un principio se aceptan los cambios tanto físicos como psicológicos, se podrá aceptar su nueva identidad, aunque esto dependerá mucho a la autoestima que tenga el adolescente, sí es alta tendrá mejor motivación, estrategias y una defensa contra los prejuicios sociales, pero si tiene un autoestima bajo vivirá en depresión, ansiedad y falta de motivación.

 

Cabe mencionar que la identidad es una construcción social, ya que intervienen muchas personas en este proceso, como lo son los padres, compañeros de clase y amigos íntimos, de acuerdo a la identidad se podrán crear personalidades reales o ideales, en ellas el adolescente piensa de manera hipotética como será su futuro ( ya sean aspectos positivos o negativos), llega un momento en donde la falta de una personalidad real causa depresiones, insatisfacción y decepción.

La adolescencia consta de dos partes. La adolescencia temprana en la cual no se sabe la identidad que se tiene, existe la preocupación de la existencia y las funciones de la personalidad mental, después de esta esta la adolescencia tardía la que se refiere al hecho de saber quien se es en realidad (el yo), se muestran las limitaciones, dentro del cual se desarrolla más el pensamiento.

Es aquí donde se da la fabula personal: los sucesos que tiene por vivir solo a el le han ocurrido. Nadie lo comprende.

Estas fueron algunas explicaciones que realizaron mis compañeros en el salón de clases, la profesora Rosita nos hizo formar un circulo en donde se realizo el juego la canasta revuelta, pienso que con el fin de evitar una clase típica.